Este proyecto aborda la puesta en valor del yacimiento del Arrabal andalusí en Murcia como una oportunidad única para hacer ciudad desde lo público. La intervención propone una solución arquitectónica sutil: una superficie ligera, semejante a una hoja de papel, que se posa sobre las ruinas sin tocarlas, plegándose en sus bordes para resolver accesos, iluminación natural, desniveles y servicios necesarios.
La propuesta busca una solución unitaria, clara y formalmente coherente. Los pliegues no solo cumplen una función técnica, sino que dialogan estratégicamente con el entorno y elementos históricos clave como el Palacio de San Esteban o la Iglesia de San Esteban, reforzando su presencia mediante la luz, las visuales y el diseño del espacio exterior.
El acceso al conjunto se sitúa en una posición que responde a la estructura urbana existente y facilita los flujos de visitantes. También se incluye un restaurante y un espacio arbolado que permite el descanso y enriquece la experiencia del lugar.
Desde el punto de vista estructural, el proyecto se basa en una retícula prefabricada, ordenada y abstracta, que se superpone a la complejidad histórica sin intervenir directamente en las ruinas. Esta estructura permite instalarse desde arriba, evitando cualquier daño. Los bordes actúan como elementos clave para garantizar la iluminación, ventilación y la visibilidad de las ruinas desde el exterior.
La plaza superior, diseñada con un enfoque unitario, permite diferentes formas de uso: desde zonas tranquilas de descanso hasta espacios aptos para eventos masivos. Gracias a la sección en V de las vigas estructurales, es posible plantar árboles y distribuir las infraestructuras necesarias sin intervenir desde el interior.
En definitiva, se trata de una intervención que respeta el pasado, realza su valor y se integra con el presente urbano, dotando al conjunto de una dimensión cívica, cultural e institucional que refuerza el vínculo entre los ciudadanos y su historia.
Ciudad
Murcia
País
España
Fecha
2019